3. Dios le envió este mensaje a Ezequías a través de Isaías: “No te engañe tu Dios en quien tú confías, diciendo: Jerusalén no será entregada en mano del rey de Asiria. [...] ¿Acaso libraron sus dioses a las naciones [...]?. (Pista: “Momentáneamente chasqueado, pero sin darse por vencido por mucho tiempo, Senaquerib le envió a Ezequías un mensaje amenazador: “No te engañe tu Dios en quien tú confías, diciendo: Jerusalén no será entregada en mano del rey de Asiria. [...] ¿Acaso libraron sus dioses a las naciones [...]? (Isa. 37:10, 12; ver además 2 Crón. 32:17)”. Párrafo 3). *