CARTA EN SOLIDARIDAD CON EL QUERIDO PUEBLO DE HAITÍ EN SU LUCHA POR DEMOCRACIA, JUSTICIA Y REPARACIONES DE LA MINUSTAH
Al Secretario General de la ONU, António Guterres
Al Secretario General de la OEA, Luis Almagro
A los gobiernos de los países miembros de la ONU y la OEA
Al pueblo de Haití y sus organizaciones

De nuestra consideración

Haití atraviesa una vez más una crisis muy profunda. Actualmente, un elemento central de la misma es la lucha contra la dictadura impuesta por el expresidente Jovenel Moïse.

Desde el año pasado este señor, luego de decretar el cese del Parlamento, gobierna mediante decretos, violando de manera permanente la Constitución del país. Así́, por ejemplo, se rehúsa a abandonar el poder a pesar de que su mandato venció́ el 7 de febrero de 2021, alegando que éste termina el 7 de febrero del año próximo, sin ningún sustento legal. Esto lo hace a pesar de los múltiples pronunciamientos en contra por parte de las principales instancias jurídicas del país, tales como el CSPJ (Consejo Superior del Poder Judicial), la Federación que agrupa a las Asociaciones de Abogados Haitianos, así́ como también de las Federaciones Religiosas y numerosas instituciones representativas de la sociedad. En ese momento, además, hay una huelga de funcionarios judiciales lo que deja al país sin ningún organismo del poder judicial funcionando.

Al mismo tiempo, esta crisis institucional se enmarca dentro de una inseguridad que afecta prácticamente a todos los sectores de la sociedad haitiana. Una inseguridad que se expresa a través de salvajes represiones de las movilizaciones populares por parte de la PNH (Policía Nacional Haitiana) domesticada por el Ejecutivo, ataques a periodistas, distintas masacres en barrios populares, asesinatos y detenciones arbitrarias de opositores, detención de un juez de la Corte de Casación bajo pretexto de fomentar un supuesto complot contra la seguridad del Estado y para asesinarlo, revocatoria ilegal y arbitraria de tres jueces de esta Corte, creación de centenares de grupos armados que siembran el terror sobre todo el territorio nacional y que responden al poder, transformando al secuestro de personas en una industria bastante próspera para esos criminales.

Los 13 años de ocupación militar por las tropas de Naciones Unidas a través de la MINUSTAH, así́ como las operaciones de prolongación de una situación de tutela a través de la MINUJUSTH y de la BINUH han agravado la crisis haitiana, apoyando a los sectores retrógrados, antidemocráticos y mafiosos. Además, cometieron graves crímenes contra la población haitiana y sus derechos fundamentales (como la introducción del cólera) que merecen procesos ejemplares de justicia y reparación. El pueblo de Haití́ pagó cara la intervención de MINUSTAH: 30 MIL MUERTOS por el cólera llevado por los soldados, miles de mujeres violadas, que ahora tienen hijos huérfanos de padres vivos, los soldados que regresaron a sus países. Nada cambió positivamente en 13 años, más desigualdad social, más pobreza, más dificultades para el pueblo y ausencia de democracia.

Las condiciones de vida de los sectores populares se han agravado de manera dramática como consecuencia de más de 30 años de políticas neoliberales impuestas por las instituciones financieras internacionales (IFIs), una severa crisis cambiaria, la congelación del salario mínimo y una inflación superior al 20% durante los 3 últimos años.

Ahora cabe recalcar que, a pesar de esta situación tan dramática, el pueblo haitiano sigue firme y se moviliza de manera constante para impedir la consolidación de dicha dictadura exigiendo la partida inmediata del expresidente Jovenel Moïse. Recientemente los días 14 y 28 de febrero centenares de miles de ciudadanos/ciudadanas expresaron claramente en la calle su rechazo a la dictadura y su firme compromiso para el respeto de la Constitución.

Teniendo en cuenta la importancia de esta lucha y que este régimen dictatorial goza todavía del apoyo de gobiernos imperialistas tales como los de Estados Unidos, Canadá́, Francia y de organismos internacionales como la ONU, la OEA, la UE y el FMI, llamamos a escuchar al pueblo de Haití que exige el fin de la dictadura así́ como también el respeto a su soberanía y autodeterminación y la instauración de un régimen de transición político controlado por los actores haitianos que tenga suficiente espacio como para lanzar un proceso de auténtica reconstrucción nacional.

Reclamamos en especial a la ONU y la OEA – que ciertamente no tiene derecho ni moral a inmiscuirse en las elecciones y otros asuntos internos de los países miembros -, a los gobiernos de todos los países, sobre todo los que se prestaron para “ocupar humanitariamente” a Haití durante 13 años, a través de la MINUSTAH-, que dejen de comportarse como si Haití fuera su colonia. ¡Basta de injerencia! Su deber es otro: asegurar justicia y reparaciones por todos los crímenes que han cometido contra ese pueblo y país, incluyendo la introducción del cólera, la violación y los abusos sexuales, la impunidad de su manipulación electoral y el uso de la “cooperación” para sus propios fines.

Solo el pueblo haitiano puede decidir sobre su futuro, pero en ese caminar cuenta con nuestra solidaridad y disposición a apoyarle con todas las acciones a nuestro alcance. Apoyamos al pueblo y los movimientos de Haití para que pueden elegir un gobierno popular de transición y una Constituyente de forma democrática.
Por una Haití Libre y Soberana.


FIRMAN ESTA CARTA:

REDES INTERNACIONALES

AIP - Asamblea Internacional de los Pueblos
Jornada Internacional de Lucha Antiimperialista
ALBA Movimientos
MMM - Marcha Mundial de las Mujeres
Foro de São Paulo
La Via Campesina
PIE - Partido de la Izquierda Europea
FDIM - Federación Democrática Internacional de Mujeres
Jubileo Sur



Sign in to Google to save your progress. Learn more
SOLIDARITY WITH THE PEOPLE OF HAITI IN THEIR STRUGGLE FOR DEMOCRACY, JUSTICE, AND REPARATIONS
To the Secretary General of the UN, António Guterres
To the Secretary General of the OAS, Luis Almagro
To the governments of the member countries of the UN and the OAS
To the people of Haiti and their organizations

Of our consideration

Haiti is once again going through a profound crisis. Central to this is the struggle against the dictatorship imposed by former president Jovenel Moïse. Since last year Mr. Moise, after decreeing the dismissal of Parliament, has been ruling through decrees, permanently violating Haiti's constitution. He has refused to leave power after his mandate ended on February 7, 2021, claiming that it ends on February 7 of next year, without any legal basis. This disregard of the constitution is taking place despite multiple statements by the country's main judicial bodies, such as the CSPJ (Superior Council of Judicial Power) and the Association of Haitian Lawyers. Numerous religious groups and institutions that are representative of society have also spoken. At this time, there is a strike by the judiciary, which leaves the country without any functioning judicial power.

At the same time, this institutional crisis is framed in the insecurity that affects practically all sectors of Haitian society. An insecurity expressed through the savage repression of popular mobilizations by the PNH (Haitian National Police), at the service of the executive power. They have attacked journalists and committed various massacres in poor neighborhoods. Throughout the country, there have been assassinations and arbitrary arrests of opponents. Most recently, a judge of the High Court was detained under the pretext of promoting an alleged plot against the security of the State and to assassinate the president, leading to the illegal and arbitrary revocation of three judges of this Court. This last period has also seen the creation of hundreds of armed groups that spread terror over the entire country and that respond to power, transforming kidnapping into a fairly prosperous industry for these criminals.

The 13 years of military occupation by United Nations troops through MINUSTAH and the prolongation of that guardianship through MINUJUSTH and BINUH have aggravated the Haitian crisis. They supported retrograde and undemocratic sectors which, along with gangsters, committed serious crimes against the Haitian people and their fundamental rights. For this, the people of Haiti deserve a process of justice and reparations. They have paid dearly for the intervention of MINUSTAH: 30 THOUSAND DEAD from cholera transmitted by the soldiers, thousands of women raped, who now raise orphaned children whose fathers, still alive, returned to their countries without assuming any responsibility. Nothing has changed for the better in 13 years, more social inequality, poverty, more difficulties for the people. The absence of democracy remains the same.

The poor's living conditions have worsened dramatically as a result of more than 30 years of neoliberal policies imposed by the International Financial Institutions (IFIs), a severe exchange rate crisis, the freezing of the minimum wage, and inflation above 20% during the last three years.

It should be emphasized that, despite this dramatic situation, the Haitian people remain firm and are constantly mobilizing to prevent the consolidation of a dictatorship by demanding that former President Jovenel Moïse immediately leave office. Recently, on February 14 and 28, hundreds of thousands of citizens clearly expressed in the streets their rejection of the dictatorship and their firm commitment in favor of respecting the Constitution.

Taking into account the importance of this struggle and that this dictatorial regime still has the support of imperialist governments such as the United States of America, Canada, France, and international organizations such as the UN, the OAS, the EU, and the IMF, we call on you to listen to the people of Haiti who are demanding the end of the dictatorship as well as respect for their sovereignty and self-determination and the establishment of a transition government led by Haitians to launch a process of authentic national reconstruction.

We especially call on the UN and the OAS - which certainly has no right or morals to interfere in elections and other internal affairs of member countries -, on the governments of all countries, especially those that lent themselves to the "humanitarian occupation" of Haiti for 13 years, through MINUSTAH -, to stop behaving as if Haiti were their colony. Enough of intervention! Their duty is another: to ensure justice and reparations for all the crimes they have committed against that people and country, including the introduction of cholera, rape and sexual abuse, the impunity of their electoral manipulation and the use of "cooperation" for their own ends.

Only the Haitian people can decide on their future, but in this effort, they can count on our solidarity and willingness to support them with all the actions within our reach. We support the people and movements of Haiti so that they can elect a popular transitional government and a Constituent in a democratic way.

For a Free and Sovereign Haiti.

SIGNATURES:

INTERNATIONAL NETWORKS
AIP - Asamblea Internacional de los Pueblos
Jornada Internacional de Lucha Antiimperialista
ALBA Movimientos
MMM - Marcha Mundial de las Mujeres
Foro de São Paulo
La Via Campesina
PIE - Partido de la Izquierda Europea
FDIM - Federación Democrática Internacional de Mujeres
Jubileo Sur
CARTA EM SOLIDARIEDADE COM POVO DO HAITI NA LUTA PELA DEMOCRACIA, JUSTIÇA E REPARAÇÕES DA MINUSTAH
Ao Secretário-Geral da ONU, António Guterres
Ao Secretário-Geral da OEA, Luis Almagro
Aos governos dos países membros da ONU e da OEA
Ao povo do Haiti e suas organizações

De nossa consideração

O Haiti está mais uma vez passando por uma crise muito profunda. Atualmente, um elemento central dela é o combate à ditadura imposta pelo ex-presidente Jovenel Moïse.

Desde o ano passado este homem, depois de decretar a destituição do Parlamento, governa por decretos, violando definitivamente a Constituição do país. Assim, por exemplo, ele se recusa a deixar o poder apesar de seu mandato ter expirado em 7 de fevereiro de 2021, alegando que termina em 7 de fevereiro do próximo ano, sem qualquer amparo legal - isso apesar dos múltiplos pronunciamentos contrários das principais entidades jurídicas do país, como o Conselho Superior do Poder Judiciário (CSPJ), a Federação que agrupa as Associações de Advogados do Haiti, bem como as Federações Religiosas e numerosas instituições representativas da sociedade. Além disso, nesse momento há uma greve de funcionários do Judiciário, o que deixa o país sem qualquer órgão do judiciário em funcionamento.

Ao mesmo tempo, essa crise institucional se enquadra em uma insegurança que atinge praticamente todos os setores da sociedade haitiana. Uma insegurança que se expressa na repressão selvagem às mobilizações populares pela PNH (Polícia Nacional do Haiti) domesticada pelo Executivo: ataques a jornalistas, massacres diversos em bairros populares, assassinatos e prisões arbitrárias de oponentes, detenção de um juiz do Tribunal de Cassação sob o pretexto de promover um suposto complô contra a segurança do Estado e de assassiná-lo, revogação ilegal e arbitrária de três juízes deste Tribunal, criação de centenas de grupos armados que espalham o terror por todo o território nacional e respondem ao poder, transformando o sequestro em uma indústria bastante próspera para esses criminosos.

Os 13 anos de ocupação militar pelas tropas das Nações Unidas através da MINUSTAH, bem como as operações para prolongar a situação de tutela através da MINUJUSTH e BINUH agravaram a crise haitiana, apoiando os setores retrógrados, antidemocráticos e gângsteres. Além disso, cometeram crimes graves contra a população haitiana e seus direitos fundamentais (como a introdução da cólera) que merecem processos exemplares de justiça e reparação.

O povo haitiano pagou caro pela intervenção da MINUSTAH: 30 MIL MORTOS da cólera levada pelos soldados, milhares de mulheres estupradas que agora têm filhos órfãos de pais vivos, soldados que voltaram a seus países. Nada mudou positivamente em 13 anos: mais desigualdade social, mais pobreza, mais dificuldades para as pessoas e a ausência de democracia.

As condições de vida dos setores populares pioraram drasticamente como consequência de mais de 30 anos de políticas neoliberais impostas por instituições financeiras internacionais (IFIs), uma grave crise cambial, o congelamento do salário mínimo e inflação acima de 20% nos últimos 3 anos.

Ressalte-se que, apesar dessa dramática situação, o povo haitiano se mantém firme e se mobiliza constantemente para evitar a consolidação da ditadura, exigindo a saída imediata do ex-presidente Jovenel Moïse. Recentemente, nos dias 14 e 28 de fevereiro, centenas de milhares de cidadãos expressaram claramente na rua seu repúdio à ditadura e seu firme compromisso com o respeito à Constituição.

Tendo em conta a importância desta luta, e que este regime ditatorial ainda conta com o apoio de governos imperialistas, como os dos Estados Unidos, Canadá, França e organismos internacionais como a ONU, a OEA, a UE e o FMI, chamamos ouvir o povo haitiano que exige o fim da ditadura e o respeito à sua soberania e autodeterminação e o estabelecimento de um regime de transição política controlado por atores haitianos que tenha espaço suficiente para iniciar um processo de autêntica reconstrução nacional.

Reivindicamos em particular à ONU e à OEA - que certamente não têm o direito ou moralidade de interferir nas eleições e outros assuntos internos dos países membros - os governos de todos os países, especialmente aqueles que se prestaram a “ocupar humanamente” o Haiti há 13 anos, por meio da MINUSTAH-, que parem de se comportar como se o Haiti fosse sua colônia. Chega de interferência! Seu dever é outro: garantir justiça e reparação de todos os crimes que cometeram contra aquele povo e país, incluindo a introdução da cólera, o estupro e o abuso sexual, a impunidade por sua manipulação eleitoral e o uso da “cooperação” para seus próprios fins.

Só o povo haitiano pode decidir sobre o seu futuro, mas nesta caminhada conta com a nossa solidariedade e disponibilidade para apoiá-lo em todas as ações ao nosso alcance. Apoiamos o povo e os movimentos do Haiti para que possam eleger um governo popular de transição e um governo constituinte de forma democrática.
Por um Haiti livre e soberano!



ASSINAM

ARTICULAÇÕES INTERNACIONAIS
AIP - Asamblea Internacional de los Pueblos
Jornada Internacional de Lucha Antiimperialista
ALBA Movimientos
MMM - Marcha Mundial de las Mujeres
Foro de São Paulo
La Via Campesina
PIE - Partido de la Izquierda Europea
FDIM - Federación Democrática Internacional de Mujeres
Jubileo Sur
¿Que parte del mundo queda su organización? / What part of the world is your organization located in? / Em qual parte do mundo fica a sua organização? *
¿En qué país se encuentra su organización? / In which country is your organization located? / Em que país fica a sua organização? *
Nombre de su organización / Organization's name / Nome da sua organização *
Su correo para contacto / You contact e-mail / Seu e-mail para contato *
Correo oficial de su organización / Official mail of your organization / E-mail oficial de sua organização *
El 29 de marzo es el Día Internacional de la Solidaridad con el pueblo de Haití. Numerosas organizaciones de todo el mundo llevarán a cabo protestas en las calles (frente a las embajadas de Estados Unidos y Haití) y en las redes sociales (#NoDictatorshipInHaiti, #DownWithUSImperialism, #LongLiveHaiti). Cuéntanos qué acciones tiene previstas tu organización para solidarizarse con el pueblo de Haití.            /            March 29 is the International Day of Solidarity for the People of Haiti. Numerous organizations around the world will hold protests in the streets (in front of the US and Haitian embassies) and on social media (#NoDictatorshipInHaiti, #DownWithUSImperialism, #LongLiveHaiti). Tell us what actions your organization is planning to show solidarity with the people of Haiti?
Submit
Clear form
Never submit passwords through Google Forms.
This content is neither created nor endorsed by Google. Report Abuse - Terms of Service - Privacy Policy