El domingo 5 de mayo a las 17 hs. nos consagramos como hijos a la Virgen de Luján.
La consagración es un acto de entrega y amor a nuestra Madre la Virgen que nos compromete a vivir con el estilo de vida de María.
Ella nos espera, nos escucha y nos aguarda. Es paciente con nosotros. Ofrezcámosle nuestro corazón y nuestra vida.
¡Que así sea!