Un producto sustituto indirecto puede no tener las mismas características que el producto que actualmente se utiliza en una entidad, sin embargo, puede sustituirlo porque cumple la misma función. Por ejemplo: un bolígrafo se utiliza para escribir, así como sirve para el mismo fin, un lápiz. La diferencia es que no se tiene el mismo resultado: lo escrito con el lápiz no es permanente, es decir, puede borrarse con facilidad. Considerando los diferentes bienes que adquiere su entidad, cuál es el factor principal que le haría decidirse por un producto sustituto indirecto: *