2. El diluvio no fue un evento mundial, sino local. (Pista: “Algunos han argumentado que el diluvio de Noé no fue mundial, sino simplemente un diluvio local. Si es así, entonces, en el contexto de lo que Dios promete en Génesis 9:15 (ver también Isa. 54:9), cada vez que hubiese otra inundación local ( y, al parecer, ocurre todo el tiempo), la promesa del pacto de Dios se rompe. En contraste, el hecho de que no haya habido otro diluvio mundial prueba la validez de la promesa del pacto de Dios”. Párrafo 2). *