Una invitación urgente a cambiar las prácticas de financiamiento

Nos encontramos en una etapa de nuestro viaje civilizatorio en la que nuestro mundo se enfrenta actualmente a un conjunto de retos globales en cascada e interrelacionados que amenazan el futuro de las personas y del planeta. Desde la pobreza endémica hasta la desigualdad racial y de género, pasando por la extinción de especies, la deforestación, el creciente fascismo y la crisis climática, la combinación de estos retos concurrentes y superpuestos indica que necesitamos transformar urgentemente muchos de los sistemas arraigados que subyacen a estos grandes problemas.  

Para tener alguna esperanza de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU y revertir la trayectoria destructiva a la que se enfrentan las personas y el planeta, debemos abordar con mayor eficacia las causas profundas de los problemas complejos en lugar de enfocarnos solamente en los síntomas, transformando las políticas, las prácticas, las costumbres, las mentalidades, las dinámicas de poder y los flujos de recursos, con efectos duraderos a nivel local, nacional y global.  Éste es el trabajo conocido como cambio de sistemas.  Se trata de un enfoque integral del cambio social que trata de abordar las características complejas, a gran escala y profundas de los problemas sociales.  

Un aspecto clave del cambio de sistemas es la colaboración sostenida.  El verdadero cambio sistémico se produce cuando múltiples actores de distintos sectores, disciplinas y grupos sociales -incluidos los financiadores y los líderes del movimiento- colaboran para alcanzar objetivos comunes durante largos periodos de tiempo.  

Aunque animamos a los financiadores a explorar muchas oportunidades diferentes para financiar proyectos que puedan conducir al bien social, incluidos aquellos que puedan ofrecer algún rendimiento financiero a los inversores, lograr un cambio efectivo de los sistemas, en particular los muchos aspectos que requieren dólares de subvención, requerirá un poderoso cambio de los enfoques filantrópicos tradicionales donde:  

(1) los financiadores tienden a confiar en la experiencia empresarial y académica para entender el impacto social, en lugar de centrarse en el liderazgo y la experiencia vivida de quienes están más cerca de los problemas que queremos abordar,
(2) la gran mayoría de la financiación se destina a aliviar los síntomas de los sistemas que fallan, en lugar de dedicarse a la labor a largo plazo de comprender, abordar y movilizar las causas profundas;
(3) la financiación de proyectos específicos se otorga en asignaciones a corto plazo, lo que también suele implicar un exceso de papeleo, una dinámica de poder transaccional y una dependencia excesiva de los parámetros a corto plazo para evaluar el éxito; y
(4) las estructuras y los criterios de los procesos de solicitud pueden dar lugar a una competencia inútil entre organizaciones, en lugar de incentivar los tipos de colaboración necesarios para cambiar los sistemas.

Un número cada vez mayor de financiadores y organizaciones están descubriendo que existe una oportunidad en tiempo real para avanzar en el progreso mundial y modelar nuevas formas de apoyar el cambio mejorando las prácticas actuales de financiación del sector social.  Estos cambios necesarios abarcan múltiples tipos de financiadores, incluyendo la financiación de la filantropía privada, de los gobiernos y de los organismos multilaterales.  

Los siguientes principios describen lo que nosotros, un gran grupo de organizaciones de la sociedad civil e innovadores del cambio de sistemas, así como muchos líderes del pensamiento filantrópico, creemos que son las prácticas más críticas y eficaces que los financiadores deben adoptar al abordar los problemas complejos y superpuestos que enfrenta nuestro mundo hoy en día.  

Le invitamos a que considere la posibilidad de adoptar las siguientes prácticas de concesión de subvenciones transformadoras.  Dado el poderoso papel que desempeñan los financiadores y los donantes a la hora de influir en el trabajo y el alcance de las organizaciones que trabajan en cuestiones sistémicas, estos cambios permitirán y empoderarán al sector social y fomentarán las colaboraciones multisectoriales que trabajan para lograr los tipos de cambios sistémicos que se necesitan con urgencia.  

Principios:
     
1. Dar una financiación plurianual y sin restricciones: Abordar las causas profundas de los problemas sistémicos interconectados requiere una adaptación y un aprendizaje continuo a largo plazo. Confiando a las organizaciones con fondos generales de funcionamiento durante varios años (al menos de tres a cinco años, y preferiblemente más) les permite tener la flexibilidad necesaria para adoptar un enfoque iterativo a largo plazo para abordar problemas sistémicos grandes y complejos.  Este tipo de inversión flexible libera a las organizaciones para que se adapten a las condiciones cambiantes y permite a las organizaciones sin ánimo de lucro centrarse en su trabajo de misión crítica en lugar de centrarse en la procedencia de las subvenciones del próximo año.  Si una entidad financiadora sólo puede ofrecer subvenciones restringidas para proyectos, haz que sean plurianuales y asegúrate de que cubra los costos directos (incluidos los salarios del personal) e indirectos de la prestación de servicios (como el alquiler de oficinas y el equipamiento).  Considere la posibilidad de proporcionar más que lo suficiente para cubrir los costos, de manera que las organizaciones sin ánimo de lucro puedan aumentar sus excedentes y reservas.
2. Invertir en el desarrollo de capacidades.  Las buenas ideas no son suficientes.  Ayude a sus socios a crear una capacidad organizativa básica y a responder a lo que ellos dicen que más necesitan.  Las organizaciones sin ánimo de lucro necesitan crear un conjunto diverso de capacidades, ya sea en su organización o a través de sus socios, para aportar fuerza colectiva y sostenibilidad a su trabajo a lo largo del tiempo.  Los financiadores que restringen los gastos generales de una organización limitan su capacidad para lograr un impacto social óptimo.  
3. Financiar redes: Las redes son herramientas de nuestra caja de herramientas para el cambio social que apoyan a las partes interesadas no sólo para que actúen en colaboración, sino también para que desarrollen iniciativas estratégicas que incluyan a los múltiples actores que forman parte de la solución.  Las redes son también una excelente fuente de desarrollo de capacidades para los participantes, incentivando la colaboración, experimentando nuevos enfoques y permitiendo que los ajustes del rumbo se produzcan de forma más rápida y eficiente.  Invertir en infraestructura y capacidad de coordinación para que las organizaciones colaboren, creen redes y trabajen juntas de forma más eficiente y eficaz.  
4. Crear relaciones transformadoras en lugar de transaccionales: Todos necesitamos evolucionar desde las corrosivas relaciones de poder que han caracterizado muchas interacciones entre financiadores y beneficiarios hasta la fecha. Para lograr la transformación, necesitamos practicar un modelo de asociación en el que todos aportemos activos y recursos al cambio en cuestión. El dinero es uno de esos activos, al igual que el conocimiento de la comunidad, el poder de la gente, las relaciones, la experiencia, el poder económico y la influencia política. Un trabajo eficaz de cambio de sistemas se basa en todos estos activos, así como en una sensibilidad compartida para escuchar, aprender, ser humilde y colaborar. Los financiadores, en particular, pueden ceder parte de su poder para construir nuestro poder colectivo de impacto.
5. Construir y compartir el poder: Las organizaciones sin ánimo de lucro y los líderes de los movimientos no han estado tradicionalmente presentes en las salas donde se toman las grandes decisiones estructurales de los gobiernos y las empresas. Esto es especialmente cierto para las organizaciones dirigidas por personas negras, indígenas y de color, así como para las organizaciones dirigidas por mujeres, jóvenes y personas con discapacidad.  Los financiadores pueden ayudar a reequilibrar estas desigualdades compartiendo el poder con el sector social, dando más recursos directamente a nivel local a las organizaciones con liderazgo y propiedad local, y haciendo inversiones más sólidas en organizaciones dirigidas por líderes de color próximos.  Esto se pondrá de manifiesto mediante el diseño de estructuras y espacios de toma de decisiones que sean más inclusivos y la oferta de apoyo operativo general y de desarrollo de capacidades que ayude a los líderes a conseguir políticas y prácticas que hagan avanzar los ODS en su ámbito de influencia. También es importante estar abierto a la financiación de nuevos emprendedores sociales en fase inicial y de jóvenes empresarios.  
6. Sea transparente y receptivo: Aporte humildad a su forma de conceder financiamiento y reconoce los desequilibrios de poder en tus relaciones. Comunique a sus beneficiarios su trayectoria en materia de equidad. Sea muy claro en cuanto a sus prioridades y expectativas, sea rápido en decir que no si no es una buena opción, y responde de manera oportuna. La urgencia de nuestros retos no exige menos de todos nosotros.
7. Simplificar y agilizar el papeleo: Las organizaciones sin ánimo de lucro dedican una enorme cantidad de tiempo a redactar propuestas de financiamiento e informes para satisfacer los requisitos de los financiadores, al tiempo que realizan el difícil trabajo de cambiar los sistemas y cumplir los requisitos normativos. Los financiadores pueden ayudar a devolver el tiempo agilizando los procesos de solicitud, coordinando con otros donantes la diligencia debida y la presentación de informes, y alineando la presentación de informes con una mentalidad de cambio de sistemas.  Informar sobre el trabajo de cambio de sistemas suele ser más complejo y matizado que enumerar los resultados a corto plazo vinculados a proyectos individuales.  Como métodos adicionales para evaluar el impacto, los financiadores pueden estar más abiertos a las historias como ejemplos de progreso, pueden preguntar a los beneficiarios qué cambios en el sistema están viendo con el tiempo, y pueden dialogar con los beneficiarios sobre lo que está funcionando en sus esfuerzos y lo que no.  
8. Ofrecer apoyo más allá del cheque: Los financiadores tienen mucho más que ofrecer que sólo el dinero. Sea un conector.  Establezca conexiones útiles para los socios beneficiarios con otros posibles financiadores y organizaciones homólogas, sea curioso y responda a sus necesidades, y cree oportunidades para mostrarlos a ellos y a su trabajo en los lugares a los que tenga acceso.  Apoye las redes que crean conexiones sólidas y proporcionan plataformas para la colaboración en lugar de la competencia.  
9. Colaborar con otros financiadores: Al igual que las organizaciones sin ánimo de lucro necesitan tejer redes para alcanzar una mayor escala, los financiadores también necesitan construir un ecosistema de inversores en el campo de cambio de sistemas. Comparta conocimientos, conexiones y experiencia con otros donantes; mejore la eficiencia a través de una acción coordinada; abra las puertas a sus beneficiarios y atraviese las mismas como socios.  Conéctese con los financiadores que invierten en áreas similares para responsabilizarse mutuamente de pensar ampliamente en su ecosistema de financiación y ser intencional para incluir a los líderes y las organizaciones que históricamente y sistemáticamente han tenido dificultades para acceder a los dólares de las fundaciones.
10. Adoptar una mentalidad sistémica en la concesión de subvenciones: Los financiadores deben adoptar una mentalidad de cambio de sistemas con sus beneficiarios para abordar su(s) problema(s) prioritario(s) elegido(s).  El objetivo general es cambiar significativamente las condiciones que mantienen el problema en su lugar.  Esto implica identificar, comprender y abordar las causas profundas de los problemas que se están abordando.  Esta mentalidad también se extiende a pensar de manera diferente sobre la evaluación y la comprensión del impacto en un horizonte a largo plazo.  

Muchos financiadores pueden señalar algunos de estos principios en los que están liderando o progresando.  Sin embargo, los avances parciales, aunque merecen la pena, no serán suficientes si queremos responder a la urgencia de las complejas necesidades a las que nos enfrentamos. Por eso, hacemos un llamado a los líderes del sector filantrópico y a los distintos tipos de financiadores para que se comprometan a adoptar todos estos principios de forma significativa dentro de sus organizaciones, de modo que se acelere nuestro compromiso compartido y nuestra capacidad para lograr un cambio social duradero.

En concreto, pedimos a los financiadores que adopten las siguientes medidas concretas y prácticas para mostrar su apoyo a estos principios:

1. Realice el Diagnóstico del Financiador sobre el cambio de los sistemas de financiación, que se encuentra aquí https://bit.ly/3qLJTt1,
que es una herramienta integral diseñada para apoyar e informar el camino hacia una filantropía más orientada al cambio de los sistemas.  Desarrolle acciones concretas sobre la base de las recomendaciones de la herramienta, trabaje para mejorar su puntuación en los próximos uno o dos años y comprométase a volver a realizar el Diagnóstico del Financiador para evaluar su progreso.  
2. Realice cambios hacia los elementos clave de la financiación del cambio de sistemas, como el aumento de la financiación concedida a los grupos que utilizan un enfoque de cambio de sistemas en su trabajo, el aumento del porcentaje de sus financiamientos que proporcionan apoyo básico sin restricciones a las organizaciones y el aumento del porcentaje de sus subvenciones que son compromisos de financiación plurianuales.  
3. Revise y agilice los procesos de concesión de financiamiento, incluyendo la identificación de al menos una forma de incorporar más perspectivas o información de los líderes cercanos para dar forma a sus decisiones de subvención.  
4. Responsabilícese de estos principios solicitando periódicamente la opinión de sus beneficiarios, ya sea a través de una encuesta anónima elaborada por usted, de un informe de percepción de los beneficiarios, de una encuesta del personal o de otros mecanismos de opinión creados por usted para solicitar opiniones.  

*Muchos de los principios de esta carta proceden de tres fuentes: Embracing Complexity, un informe de colaboración de Catalyst 2030, Ashoka y McKinsey & Company que refleja las perspectivas de muchos emprendedores sociales de todo el mundo; The Trust Based Philanthropy Project; y los principios de la Filantropía Basada en la Equidad Racial.

Estamos deseando trabajar con usted en el viaje compartido para crear soluciones duraderas para muchos de los mayores problemas a los que se enfrentan las personas y el planeta hoy en día.  

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