Señor presidente Luis Abinader:

Desde hace dieciocho años diferentes grupos de la sociedad civil han realizado actividades anticoloniales, los días 12 de octubre de cada año en el Parque Colón de manera pacífica. El pasado día 12, un conjunto de organizaciones convocó una actividad cultural denominada Jornada Anticolonial “12 de octubre nada que celebrar”, en el marco de una serie de actividades que hemos llamado Octubre Cimarrón. Esta actividad, convocada por organizaciones como Guabancex Viento y Agua, Acción Afro-Dominicana, Cooperativa de Producción Social de la vivienda y el Hábitat (COOPHABITAT), El Grito de los Excluidos, Museo de la Dignidad, Desalojo Cero, Reconocido, Mujeres Socio-Políticas Mamá Tingó y el Comité Dominicano de los Derechos Humanos -CDDH-.

Han desarrollado diversas actividades como conferencias, performance y una parada pacífica frente a la estatua de Cristóbal Colón. 

En dicha jornada se honra el legado de lucha de los indígenas y su resistencia en contra de la colonización en nuestra isla. En cada actividad se lleva el mensaje de no celebrar el genocidio, ecocidio y la propuesta de que la estatua sea llevada a un museo en donde se explique todo el proceso colonial que ha significado para todo los indígenas y sus descendientes, una narrativa de exclusión, racismo y negación de la matriz colonial que ha significado una falta de diálogo que excluye el legado de los indígenas  y la falta de entendimiento de estos hechos históricos.

En esta actividad resaltarnos a nuestros héroes indígenas como: Caonabo, Guarocuya y Anacaona, y otros grupos de indígenas que lucharon contra los castellanos. El día 12 de octubre, los diferentes grupos que suscribimos esta carta, se vieron indignado por la presencia de una turba violenta, encabezada por Luis Acosta Moreta -Luis El Gallo- y Ángelo Vázquez, pertenecientes a la organización trujillista y neonazi denominada Antigua Orden Dominicana (AOD), que atacó e impidió la realización de esta actividad en el Parque Colón -denominado por nosotros como Parque Anacaona-, en la Ciudad Colonial. 

Pese a que existían amenazas públicas de violencia, por parte de esa organización las diferentes organizaciones convocantes realizaron una denuncia pública enviada a medios de comunicación y recogida en el periódico Acento, con la finalidad de que las autoridades personificadas en usted, tomarán medidas para impedir actos de violencia. Pese a que dicho comunicado se realizó, no se encontró a ninguna autoridad presente que impidiera los acontecimientos de violencia y violación a los derechos civiles de convocantes y participantes.  La Antigua Orden llegó desde el Parque Independencia escoltada por integrantes de la Policía Nacional, y junto a policías que ya hostigaban a participantes del acto a la Cacica Anacaona, no tomaron ninguna medida para prevenir la agresión física y verbal y más bien, se observó cooperación entre integrantes de la Policía Nacional, la Politur, la Dirección General de Migración y los paramilitares de la AOD. 

Las autoridades policiales a empujones nos exigían la retirada del parque, mujeres y hombres fueron agredidos, mientras le otorgaron licencia privilegiada para estar la cabeza de la AOD a los pies de la estatua. 

Bastó la acusación de que éramos haitianos, y que el performance era vudú, para justificar la brutal e inhumana agresión.

Buena parte de la población ha visto este hecho como una violación a los derechos civiles que de acuerdo con nuestras leyes constitucionales y otras jurisprudencias son parte de nuestros derechos como ciudadanos. En todas las sociedades democráticas, dichos grupos son considerados neonazis y existen leyes para impedir que puedan tomar las calles e impidan el derecho de otros grupos y de los y las ciudadanas.   

Este grave hecho tiene que llamar a una profunda reflexión social y exigimos a usted, señor Presidente, que aplique las leyes que sostienen el Estado de Derecho, pues ningún gobierno democrático puede permitir que tales hechos puedan acontecer y permita que afecten a diferentes organizaciones que tienen el derecho a existir. La democracia sólo puede estar presente cuando se respetan los derechos de los individuos y de sus organizaciones. Su gobierno ha sido elegido bajo los estándares democráticos. Por tales razones, todas las organizaciones y el país le exigen a usted que impida que dichos grupos puedan ser apoyados por las autoridades militares o estén visitando de manera violenta, los diferentes lugares: universidades, plazas públicas, centros cívicos, casas, entre otras. 

Es importante que usted tenga la información de que este grupo ha realizado amenazas contra personas de las organizaciones firmantes, periodistas y figuras públicas por no estar en consonancia con sus ideas fascistas. Se necesita de su intervención directa para detener a este grupo u otro que rompan o quieran impedir los derechos y libertades democráticas del pueblo dominicano.

En la proclama que se leyó el 12 de octubre frente a periodistas y personas que se quedaron apoyando la jornada, a pesar de los golpes e indignación de los grupos firmantes de las organizaciones convocantes de la Jornada Anticolonial se expresó una perspectiva crítica, la colonización no fue un encuentro cultural amistoso, sino que trajo destrucción y muerte a los pueblos originarios de la isla y del continente, destruyendo las culturas originarias. En vez de celebrar acríticamente el día de la hispanidad o el día de la raza, consideramos que se debe reconocer que el encuentro entre colonizadores y los pueblos autóctonos fue un genocidio, un epistemicidio y un ecocidio.

Señor presidente, fue un sencillo homenaje a Anacaona y a los pueblos originarios, la acción performática que la AOD y otros grupos que reivindican abiertamente a la dictadura trujillista se dispusieron a boicotear, agrediendo a la Artista, a organizadores y participantes. Lamentablemente este ataque no es algo nuevo o inesperado. Desde hace años, diversas organizaciones y personalidades vienen advirtiendo sobre el peligro que representa para la sociedad dominicana el incremento de los discursos de odio racista, homófobo, misógino y antihaitiano por parte de grupos ultraconservadores y de ultraderecha y la impunidad de la que gozan estas organizaciones para realizar amenazas de muerte en contra de periodistas, activistas de derechos humanos, organizaciones de la comunidad domínico-haitiana, inmigrantes haitianos, del Movimiento LGBTIQ y feministas.

El hecho de que la “Vieja Orden” (AOD) y otros grupos antidemocráticos puedan, con la complicidad de integrantes de la Policía Nacional, impedir la realización de actos culturales, protestas, actos de solidaridad, jornadas cívicas y actividades académicas, representa una grave limitación a la libertad de expresión, el derecho de reunión y el derecho a la protesta, todos derechos democráticos que están consagrados en nuestra Constitución.

El pasado 12 de octubre, varias compañeras y compañeros fueron brutalmente golpeados, entre otros, Jehdy Vargas y Maribel Núñez. Los integrantes de la Policía Nacional presentes en el lugar no impidieron la agresión ni detuvieron a ninguno de los agresores. Pese a la amplia evidencia en vídeos publicados en las redes sociales, tampoco la Procuraduría General de la República ha emprendido acciones contra los responsables de este ataque. No es la primera vez que la (AOD) realiza amenazas de muerte para intimidar a quienes organizan actividades democráticas con las que ellos, no están de acuerdo, por sus ideas homogéneas y cerradas, pero en esta ocasión pasaron de las amenazas, al ataque físico.

El hecho de las autoridades haber ignorado y permitido la impunidad de graves violaciones a la ley por parte de estas organizaciones extremistas y fascistas ha sido lo que les ha permitido profundizar sus acciones en contra de las libertades públicas. En el anterior gobierno, el jefe de la Policía Nacional, Ney Aldrin Batista, se refirió a la AOD como “muchachos” que luchan por “valores”, desestimando, así las denuncias del periodista Marino Zapete sobre amenazas de muerte que había recibido de la AOD. 

En junio de 2020 extremistas y trujillistas atacaron la realización de un homenaje a George Floyd, víctima estadounidense del racismo policial. En septiembre de 2021, ACNUR y la OIM debieron suspender una exposición de fotógrafos venezolanos, luego de que la AOD los amenazara de muerte. En la Feria Internacional del Libro de 2022, la AOD amenazó de muerte a editoras y la autora del libro La muñeca de Dieula y el Ministerio de Cultura optó por cancelar la presentación de ese libro en el marco de la Feria. Estos son solo algunos entre muchos ejemplos de una peligrosa tendencia. Recuerde usted, que la historia está marcada por estos procesos violentos que gestaron muchas muertes para la humanidad, como los fascios en la Italia de Mussolini y en la Alemania de Hitler. No se puede permitir dichos grupos porque se corre el peligro de perder la democracia y los derechos civiles de nuestro país.

La prensa y redes sociales documentan de autoridades del Estado dominicano que han sostenido reuniones públicas con la AOD, legitimando así su accionar, en las que también han participado en movilizaciones conjuntamente con la AOD y otras organizaciones de ultraderecha el 6 de agosto y el 1 de octubre, en Santo Domingo y Santiago respectivamente. Es importante que se investigue, si fondos públicos financian la actividad antidemocrática y con elementos terroristas de la AOD.

Exhortamos a su gobierno y a todas las autoridades competentes bajo su liderazgo a poner fin, a cualquier atisbo de tolerancia o complicidad con las acciones criminales y la permanente incitación a la violencia y el odio racial, a la misoginia y la homofobia, que son el tipo de acciones y propaganda que caracterizan a la AOD y otras organizaciones de filiación trujillista y ultraderechista. Llamamos al gobierno a tomar acciones para salvaguardar la libertad de expresión, libertad de reunión y libertad de manifestación ante las agresiones y hostigamiento de la AOD y otras organizaciones intolerantes, antidemocráticas y trujillistas. Recordemos que la exaltación de la figura de Trujillo y de la masacre de 1937, que la AOD realiza públicamente, están fuera del marco de la legalidad y no están amparadas por la libertad de expresión.

De no tomarse medidas para impedir que continúe la impunidad y la connivencia entre las autoridades y estos grupos ultraderechistas y trujillistas, tendremos que concluir que se trata de una política de Estado. Le hacemos un llamado urgente a rectificar y tomar distancia de las acciones antidemocráticas de la AOD y otras organizaciones de ultraderecha, así como aplicar la ley y la Constitución, grupos paramilitares no están amparados por las mismas.

Atentamente,

 ORGANIZACIONES FIRMANTES:

1. Acción Afro-Dominicana

2. El Grito de los Excluidos

3. Museo de la Dignidad

4. Desalojo Cero

5. Reconoci.do 

6. Mujeres Socio-Políticas Mamá Tingó

7. Comité Domicano de los Derechos Humanos -CDDH-

8. Movimiento Rebelde

9. Movimiento Caamañista -MC-

10. Coordinación Feministas de Izquierda -COFIZ-

11. Partido Comunista del Trabajo PCT

12. Coordinadora Popular Nacional

13. Fátima González /Junta de Prietas

14. Theolet Gelin /Asociación de la comunidad migrante Domínico Haitianos ACMDH INC

15. Altagracia Jean Joseph /Fundación Código Humano