Se trata de una Jornada donde estarán presentes expertos en ecología y espiritualidad vinculados a tradiciones religiosas y espirituales, a los que se les pedirá que hablen de la emergencia climática y de los conflictos entre humanos.

El objetivo de la jornada es mostrar la inextricable relación existente entre los mensajes de inclusión, amor y comunión procedentes de la naturaleza y, al mismo tiempo, el de las personas que tienen sus propias creencias y convicciones.

Se pretende, también, explicitar y subrayar la relación existente entre los criterios de inclusión que orientan las relaciones interpersonales y intercomunitarias, con la visión holística y armónica de la naturaleza y los seres vivos. Las religiones y convicciones deben trabajar sinérgicamente a favor de una especie humana a la vez unida y diversa.

Se trata, no sólo de visualizar la relación que existe entre el papel social y humano de las tradiciones religiosas y dos de los grandes desafíos contemporáneos del planeta: la emergencia climática y la diversidad cultural y conviccional; sino también mostrar de qué manera una gestión positiva de estos dos desafíos pasa por una gestión positiva e inclusiva de la diversidad religiosa y conviccional.

Estas dos emergencias, una natural y otra social, no se pueden permitir ni la indiferencia ni, mucho menos, la oposición de las tradiciones religiosas y espirituales. Necesitan, para poder ser abordadas con garantías, su solidaridad y recibir aportaciones positivas. La Jornada pretende ser un paso adelante hacia este objetivo.