Introducción
JEREMÍAS:
Jeremías ejerció su ministerio profético en Judá, en un periodo de franca decadencia, que abarcó desde el año trece de Josías, el último gran reformador y restaurador, hasta después de la caída de Jerusalén, sumando más de cuarenta años en los que abundó la idolatría, la apostasía, la soberbia y la rebeldía; razón por la que Dios decide castigar a su pueblo permitiendo que los caldeos, venidos de Babilonia y bajo el reinado de Nabucodonosor, tomaran Jerusalén y se llevaran cautivos a los judíos por un lapso de setenta años; eventos que Jeremías continuamente anunciaba.
LAMENTACIONES:
Por lo que al libro de Lamentaciones, éste fue escrito por Jeremías, y está formado por cinco elegías en las que el escritor llora por la destrucción de la ciudad de la que decía “el gozo de toda la tierra” (Lm. 2:15; Sal. 48:2).