Los/as abajo firmantes, trabajadores y trabajadoras de los distintos escalafones dentro del CONICET, nos dirigimos respetuosamente a las conducciones de los dos gremios que nos representan, ATE y UPCN, para manifestar nuestra preocupación por la inacción frente al grave deterioro salarial que sufrimos todos/as los/as trabajadores/as encuadrados/as dentro de la Paritaria de la Administración Pública Nacional, que, en ausencia de un Convenio Colectivo de Trabajo propio, incluye a quienes nos desempeñamos en CONICET.

Es de público conocimiento que la última paritaria firmada por los gremios y el Estado empleador, en 2019, quedó muy rezagada frente a la inflación. Ese acuerdo nos concedió un 28% de aumento en cuotas, frente a una inflación acumulada que solo en 2019 fue de 55%. La paritaria, a su vez, contenía cláusulas de revisión que debían ejecutarse en noviembre de 2019 y marzo de 2020. Si bien la inflación acumulada rebasó con creces la pauta de aumento salarial, las instancias de revisión no se abrieron. En este escenario, nuestros sindicatos no solo no convocaron a luchar por una recomposición salarial sino que, peor aún, algunos ni emitieron palabra. Tampoco convocaron a la lucha por un aumento salarial en mayo de este año, cuando se venció la paritaria 2019 y debía discutirse el acuerdo paritario para el 2020. Desde ese momento la negociación paritaria pasó a cuarto intermedio, sin ninguna oferta de recomposición salarial, y no escuchamos mayores quejas de los gremios. Hoy, pasados dos meses y medio desde que venció la paritaria, seguimos esperando que los sindicatos asuman la representación de nuestros intereses como trabajadores/as, reclamando por el aumento y la recomposición salarial.

Muchos/as trabajadores/as de CONICET cobramos salarios por debajo de la línea de pobreza. Otros, estamos apenas por encima de ella. En este contexto, nuestros gastos se elevan día a día, por efecto de una inflación que no se detiene y porque debemos cubrir de nuestros bolsillos abultadas facturas de luz, gas e internet porque nos encontramos trabajando desde nuestras casas. Llegamos a esta situación tras muchos años de paritarias a la baja. Distintos cálculos indican que en los últimos 10 años, nuestros salarios se han reducido entre un 50 y un 70%. La situación es insostenible: no llegamos a fin de mes, no podemos pagar el alquiler y nos endeudamos más y más cada mes para cubrir los gastos cotidianos asociados a nuestras tareas laborales.

Necesitamos una recomposición salarial urgente. Y por ello, esperamos que nuestros sindicatos se pongan al frente de ese reclamo. Nos resulta incomprensible que, ante tamaño deterioro salarial, las conducciones de nuestros gremios se desentiendan de sus obligaciones como representantes en la lucha por nuestros derechos al punto de no hacer nada al respecto. A tal punto llega esta inacción gremial, que aquellos a quienes deben representar hemos comenzado a organizarnos por nuestra cuenta: convocamos a reuniones abiertas, elaboramos cartas abiertas que recogieron miles de firmas (bit.ly/3214bTV, bit.ly/3iM7vIw, bit.ly/cartacic y bit.ly/CartaCPA) y convocamos a medidas de protesta que tuvieron amplia repercusión. Nuestros sindicatos no solo no nos acompañaron, sino que siguen en silencio. Nos sobra voluntad de lucha, pero nuestros sindicatos no nos convocan a pelear por lo que nos corresponde. Muchos/as de nosotros/as estamos afiliados porque consideramos necesario fortalecer las estructuras gremiales para defender en mejores condiciones nuestros intereses como asalariados/as. Pero se hace difícil convencer a nuestros/as compañeros/as de afiliarse, porque no podemos mostrar qué hacen nuestros sindicatos en defensa de sus derechos. Aun así, continuamos afiliados/as y no renunciamos a sumar más y más compañeros/as a los gremios, porque estamos convencidos de que los sindicatos son sus afiliados/as, no los dirigentes de turno.

Por todo esto, hacemos un llamamiento público a las conducciones de nuestros gremios, ATE y UPCN, para que se pongan a la cabeza de la lucha por recomposición y aumento salarial que ya iniciamos las bases. No dudaremos en sumarnos a un plan de lucha para dar pelea por estos reclamos junto a todo/as los/las trabajadores/as estatales, y por la apertura de las negociaciones de un Convenio Colectivo sectorial para los trabajadores y trabajadoras de CONICET.
 
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