Accessing the Internet and online services are essential lifelines for Venezuelans living in a political and economic crisis. Recently, some tech companies have tragically decided to unnecessarily drop all Venezuelan clients in response to US President Trump's Executive Order 13884; which is intended to block support to the Government of Nicolas Maduro in Venezuela and related sanctioned individuals.

The order, however, doesn't call for an outright ban of services to Venezuelans, only to the Government of Venezuela and sanctioned individuals. If more tech companies decide to follow with similarly overzealous actions, the already vulnerable Venezuelans stand to lose their capacity to work or effectively exercise their rights online.

Internet domains provider Sedo.com LLC, creative platforms and software firm Adobe Inc, and online money transfer service TransferWise Ltd have decided to close venezuelan accounts at large; collaterally affecting their many honest and hard working clients that depend on their software and services and are not targeted by the Executive Order. Hosting platform Heroku similarly had blocked the creation of new accounts from Venezuela but seem to be registering new ones again, we applaud Heroku's reversal.

Accessing the Internet and online services is critical for everything from getting independent news, exercising freedom of speech and being productive during the current crisis, especially when the internet is being heavily censored and users and organizations are under state-sponsored attacks. Outright banning Venezelan users from important services will create more harm and limit their own agency in the last free medium Venezuelans still have access to.

We urge tech companies to preserve access to their services to Venezuelan users. Complying with regulations in ways that help protect the rights of Venezuelans, which are already threatened at home, instead of further endangering them.

El acceso a internet y servicios en línea son esenciales para muchos venezolanos que viven en medio de una crisis política y económica. Recientemente, algunas compañías de tecnología han tomado la lamentable e innecesaria decisión de cerrar las cuentas de clientes venezolanos como respuesta a la Orden Ejecutiva 13884 emitida por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, la cual busca bloquear el apoyo al gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y personas relacionadas con el mismo que ya han sido sancionadas.

Sin embargo, la orden no solicita una prohibición total de los servicios a los venezolanos, sólo va dirigida al gobierno de Venezuela y las personas sancionadas. Si otras compañías de tecnología deciden aplicar acciones similares los venezolanos, que ya se encuentran en una situación vulnerable, pueden perder la capacidad para trabajar o ejercer efectivamente sus derechos en línea.

El proveedor de dominios de internet Sedo, la plataforma creativa y firma de software Adobe y el servicio de transferencias de dinero en línea TransferWise, han decidido cerrar de forma masiva las cuentas de venezolanos; afectando de forma colateral a clientes honestos y trabajadores, que no son el objetivo de la Orden Ejecutiva y dependen de los servicios y software de estas compañías. La plataforma de servicios de hosting Heroku también bloqueó la creación de nuevas cuentas desde Venezuela, pero aparentemente está permitiendo la creación de cuentas nuevamente y aplaudimos esta decisión.

El acceso a internet y servicios en línea es crítico en Venezuela, desde tener acceso a noticias independiente, ejercer la libertad de expresión y ser productivo durante la crisis actual, especialmente cuando se sufre altos niveles de censura en internet y tanto usuarios como organizaciones sufren ataques informáticos dirigidos por el gobierno. Prohibirle a todos los usuarios venezolanos el uso de servicios importantes puede hacer más daño y limitar el uso del último medio libre disponible para los venezolanos.

Instamos a las compañías de tecnología a mantener el acceso de sus servicios a usuarios venezolanos, cumpliendo con las regulaciones de una forma que preserve los derechos de los venezolanos, en lugar de vulnerarlos aún más.